sábado, 4 de abril de 2009

Marcha atrás


Íbamos marcha atrás, sin mirar.
Caminábamos de espaldas,
buscando algo a lo que aferrarnos,
seguridad alguna más allá
de lo que dejábamos
a nuestro paso y podíamos ver.

Íbamos marcha atrás, como
cangrejos sin pinzas.
Te quise coger la mano para tener
fuerzas y darme la vuelta.
Pero opté (optamos) por hacer
de nuestra cobardía nuestro grito de guerra valiente.

Y continuamos yendo marcha atrás, sin mirar,
hasta que alguno de los dos
no pudiera más y se parase.
¿Quién será? ¿Cuál de nosotros dos se decidirá?

Tú no podías ganar, pero yo quise perder.
Yo, y sólo yo debo pagar el precio de nuestro fin pactado.
Yo me encargaré de la cuenta, tú invítame a sufrir.

Tú no podías ganar, pero yo quise perder
en esta carrera marcha atrás.

Tú no podías ganar, pero yo te quise querer.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Sabes que me encanta. Bravo, Edu.

Nos vemos esta tarde pezqueñin. Un besote

Publicar un comentario